Por Praede Olivero Feliz
Era lunes 6 de julio, radiante, con matices de lluvia que cedía ante el empuje de Bolivar, libertador de América, con un continente desparramado a golpe de valentía y de coraje que paría independencia.
Convocados por el Embajador de la hermana República Bolivariana de Venezuela, su excelencia Alberto Castellar Padilla, cultor del ejemplo de Chávez y de Bolivar, admirador de Duarte y de Caamaño, asistimos a la celebración del 204 aniversario de la independencia de Venezuela.
Las representaciones de la Cancillería Dominicana, de varios ministerios, representados por Vice-Ministros, del cuerpo diplomático, destacándose la presencia de los embajadores del ALBA: Cuba, Nicaragua y Ecuador, engalanaban la simbiosis tarde noche, rememorando las tardes de Esteffanía, en el más bello continente imaginario de cualquier mitología.
Allí, se escuchaba claramente la caracola de Enriquillo, las señales de humo del negro Lemba y la bravura de Caamaño, enarbolando a Duarte en sus carteles banderas con astas de fusiles, de cabecera de su puente, donde la bravura, con el pecho desnudo y descubierto aplastó tanques, desafió cañones y detuvo la cobardía, que la patria vendía.
Es que Venezuela dedicó el 204 aniversario de su independencia a la conmemoración del 50 aniversario de la Revolución de Abril del 1965, con el frente de excombatientes, uniformados y presentes, Francis, el hijo del comandante y su viuda, el poeta hermano, amigo, patriota Mateo Morrison y otros tantos combatientes, nacionales y extranjeros.
Castellar Padilla resaltó las épocas de Bolivar y de Chávez; la necesidad de mantener la democracia en Venezuela, de ganar las elecciones de diciembre para darle el valor que tiene la inversión del 9% (nueve por ciento) del presupuesto para la educación, cuando las Naciones Unidas recomienda el 7% (siete por ciento). También resaltó los bloques de naciones impulsados por Chávez y Venezuela y el programa Petrocaribe, sus inversiones, las que vendrán al país y a mi Barahona querida.
Un trío venezolano y el grupo de baile folclórico Casandra Damirón de Barahona, interpretando canciones románticas y del folclor venezolano, pusieron fin a la celebración para dar paso a la sección de fotos y a los intercambios entre los participantes en la celebración del 204 aniversario de la independencia de Venezuela.
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